Los jóvenes de primaria trabajaran en el futuro en trabajos no inventados

Los jóvenes de primaria trabajaran en el futuro en trabajos no inventados

La población se está concienciando de que el destino de la civilización dependerá de una forma u otra de la tecnología robótica. Muestra de ello es que el método educativo se encuentra en pleno proceso de evolución, a un compás más despacio de como debiera, por tristeza, pero lo está haciendo.

El desarrollo de la tecnología robótica educativa es imparable, pero en muchos estados, como es el caso de España, está siendo parado por la carencia que encuentran las compañías en el momento de contratar personal capacitado para ampliar sus plantillas. El dato apunta a que algo menos del 50% de las empresas europeas experimentan problemas para incorporar profesionales en TIC.  

El reto es revertir urgentemente dicha actitud y evitar que nos acabemos retrasados tecnológicamente por no haber sido capaces de proporcionar a los jóvenes de conocimientos en programación y tecnología robótica.

Parece que hay acuerdo en que, una de las soluciones más importantes, es dotar a los alumnos de técnicas por medio de una educación STEAM, aportando métodos que potencien su creatividad y herramientas que inciten las competencias inherentes de trabajar en equipo. Para lograrlo, los jóvenes requieren utilizar las ideas adquiridas, del mismo modo que guiarles para que ellos sean capaces de encontrar soluciones a sus errores a través de un pensamiento crítico.

Contestar esta interrogación requiere tener en cuenta previamente sobre si los que tienen el compromiso de desarrollar un método educativo capacitado, son conocedores del problemático futuro al que nos encontramos. ¿Expresarlo en voz alta es ser catastrofista? Ahora os damos unos hechos…

Mckinsey & Company, una de las consultoras de mayor reputación a nivel mundial, augura que para el año 2030, hasta 375 millones de hombres en el mundo serán despedidos de su puesto de trabajo como resultado de la robotización. Según el Foro Económico Mundial, el 65% de los escolares que se están estudiando en la actualidad educación Primaria ejercerán en puestos de trabajo que de momento aún no se han inventado.

Ahora podríamos preguntarnos si estamos a tiempo de proporcionar herramientas educativas válidas a nuestros jóvenes. Lo único que sabemos a ciencia cierta es que la oferta laboral se va a romper beneficiando a los que logren amoldarse a un escenario cambiante que va a andar en torno a la transformación digital, los dispositivos robóticos y la configuración. Por ello es fundamentalmente importante convencer entre los alumnos que seguir preparándose a lo largo de su vida va a dejar de ser una costumbre saludable, sino una parte más de nuestra vida profesional.

En estos momentos, en la provincia de Madrid, los estudiantes llevan estudiando robótica desde Primero de Secundaria desde el período 2015/16, aun así, se acaba de pedir en la Asamblea de Madrid un proyecto para que se introduzca la materia de tecnología, programación y robótica desde 5º de Primaria.

Desde luego sería un avance más a la hora de llevar la ciencia y la tecnología a los estudiantes. Desarrollar un modelo educativo en el que el estudiante y el robot convivan, favorecerá a la hora de incitar su interés en ellos e ir aumentando habilidades.

Son muy diversas las posibilidades que encuentras en el mercado para aproximar los robots a los más pequeños. Y no únicamente para construirlos y divertirse con ellos, sino que pueden diseñar con códigos de fácilmente y adecuada para una edad tan prematura. Que los niños se desarrollen con naturalidad rodeados de sensores, no debería de verse desde una óptica dispar a la de los juguetes con los que correteábamos en nuestra niñez.

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